Los motores fueraborda tienen la ventaja de ser desmontables: todos sus componentes (motores, hélices, transmisiones) se combinan en una sola unidad. Este tipo de motor es ideal para embarcaciones semirrígidas o botes, pero también como motor auxiliar en barcos de vela.
Hay dos tipos de propulsión posibles para un motor fueraborda:
- Gasolina: suelen ser los modelos más potentes. Si lo que busca es rendimiento y velocidad, y/o necesita navegar largas distancias, el motor de gasolina es el que debe elegir.
- Eléctrico: silencioso, el motor fueraborda eléctrico es ideal para pescar, o para navegar en reservas naturales. Este tipo de modelo es ligero, fácil de usar y requiere poco mantenimiento. Por otro lado, sólo le permitirá navegar distancias relativamente cortas, en aguas con poca corriente.
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